miércoles, 26 de octubre de 2016
SAMUEL MORRIS, 1872-1893 PRÍNCIPE KABOO
PRÍNCIPE KABOO
NATIVO DEL AFRICA OCCIDENTAL MISTICO CRISTIANO
APOSTOL DE LA FE SENCILLA
EXPONENTE CABAL DE UNA VIDA
LLENA DEL ESPÍRITU SANTO
Fuentes: Samuel Morris, por Lindley Baldwin, y La investidura del poder, por O.J. Smith
_______________________________________________
INCOMPRENSION CONTEXTO REMOLINEANDO
2 SAMUEL 6. 12-23
Por el autro del blog
Hay muchas formas de alabar tu nombre
y de exaltarte. !oh Jehova !
hay muchas formas de magnificarte
pero ahora, lo haré así
remolineando, remolineando
celebrare a Jehova
remolineando, remolineando
me haré mas vil por causa de Jehova
saco mi vida del anonimato
me dio corona y vestido real
asi es Jehova que exalta al pequeño
///por causa de el yo me haré mas vil///
lara lara lara lara lara lara lara
lara lara lara lara lara lara lara
lara lara lara lara lara lara lara lara
///remolineando, remolineando
celebrare a Jehova
remolineando, remolineando
me haré mas vil por causa de Jehova///
///lara lara lara lara lara lara lara
lara lara lara lara lara lara lara
lara lara lara lara lara lara lara lara////
remolineando, remolineando
celebrare a Jehova
remolineando, remolineando
me haré mas vil por causa de Jehova
David trae el arca a Jerusalén
2 SAMUEL 6. 12-23
12 Fue dado aviso al rey David, diciendo: Jehová ha bendecido la casa de Obed-edom y todo lo que tiene, a causa del arca de Dios. Entonces David fue, y llevó con alegría el arca de Dios de casa de Obed-edom a la ciudad de David.
13 Y cuando los que llevaban el arca de Dios habían andado seis pasos, él sacrificó un buey y un carnero engordado.
14 Y David danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; y estaba David vestido con un efod de lino.
15 Así David y toda la casa de Israel conducían el arca de Jehová con júbilo y sonido de trompeta.
16 Cuando el arca de Jehová llegó a la ciudad de David, aconteció que Mical hija de Saúl miró desde una ventana, y vio al rey David que saltaba y danzaba delante de Jehová; y le menospreció en su corazón.
17 Metieron, pues, el arca de Jehová, y la pusieron en su lugar en medio de una tienda que David le había levantado; y sacrificó David holocaustos y ofrendas de paz delante de Jehová.
18 Y cuando David había acabado de ofrecer los holocaustos y ofrendas de paz, bendijo al pueblo en el nombre de Jehová de los ejércitos.
19 Y repartió a todo el pueblo, y a toda la multitud de Israel, así a hombres como a mujeres, a cada uno un pan, y un pedazo de carne y una torta de pasas. Y se fue todo el pueblo, cada uno a su casa.
20 Volvió luego David para bendecir su casa; y saliendo Mical a recibir a David, dijo: !!Cuán honrado ha quedado hoy el rey de Israel, descubriéndose hoy delante de las criadas de sus siervos, como se descubre sin decoro un cualquiera!
21 Entonces David respondió a Mical: Fue delante de Jehová, quien me eligió en preferencia a tu padre y a toda tu casa, para constituirme por príncipe sobre el pueblo de Jehová, sobre Israel. Por tanto, danzaré delante de Jehová.
22 Y aun me haré más vil que esta vez, y seré bajo a tus ojos; pero seré honrado delante de las criadas de quienes has hablado.
23 Y Mical hija de Saúl nunca tuvo hijos hasta el día de su muerte.
domingo, 1 de noviembre de 2015
INOLVIDABLE SERIE EL TOQUE DE UN ANGEL
!BENDITO SEA MI REDENTOR JESUCRISTO!
Esta serie fue vista por millones de personas en todo el mundo, los productores recibieron miles y miles de testimonios de hombres y mujeres. Aún en las carceles más duras de los Estados Unidos muchos prisioneros la veían y fueron cambiados en su corazón. En algún segmento de algún cápitulo probablemente algunos cristianos no estarían muy de acuerdo, pero en su totalidad fue una serie inspirada y que Dios usó para sanar multitud de corazones.
jueves, 17 de marzo de 2016
915-1935- ¿ DONDE ESTÁ TU HERMANO ?-2014
EL HOLOCAUSTO-SHOÁ
miércoles, 11 de noviembre de 2015
A LA SOMBRA DEL EMANCIPADOR- ABRAHAM LINCOLN-Por T. E. Murphy 1950
1950
inspira el noble monumento
bendición
Proverbios 10.7
martes, 23 de febrero de 2016
EL AVIÓN FANTASMA Por el coronel Robert L. Scott, Ir. Autor de God Is My Co-Pilot Abril de1945
El Times de Nueva York, dijo de su libro God Is My Co-Pilot «que era la narración individual más interesante de toda la guerra». Damned to Glory es una colección de relatos poco conocidos, compilados en homenaje a sus valientes camaradas y a sus incansables aeroplanos. El título está tomado un verso de una composición que el propio Scott escribió sobre el P-40: «Damned by words but flown to glory ».
Autor de God Is My Co-Pilot
En, aquel momento se dio la alarma. Campanillearon los teléfonos.
— ¿Qué rayos ocurre, capitán Chow? El oficial chino fijó una banderita roja en el mapa.
—No lo sé. Del R-15 avisan la presencia de un aparato desconocido que viene hacia acá volando muy bajo.
Japonés no era con seguridad. Los japoneses no se aventuraban tan adentro con aquel tiempo de perros. ¡Y un avión solo! Tampoco arriesgaban ellos así un aparato solo. Estaban harto escarmentados. De sobra sabían que lo enviaban a una destrucción segura.
Sin embargo... ¿si fuese un ardid? Por .si acaso, Johnny dio la orden: «Todo el mundo alerta. A Costello que se prepare a salir conmigo. Los otros que se queden en tierra. Que despeguen únicamente si los llamo ».
Dos aviones rodaron por la pista levantando a un lado y otro grandes salpicaduras de fango rojizo. Desaparecieron como tragados por las oscuras nubes que chorreban agua.
Johnny contó después lo ocurrido. EStaba a unos 16 kilómetros del campo cuando avistó el aeroplano a unos 6o metros debajo del suyo. Maniobró en seguida para atacarlo. Era un aparato desconocido que venía de territorio enemigo. Las órdenes eran terminantes: debían derribarlo.
Johnny y Costello dispararon a la vez. Se acercaron tanto, que pudieron ver las insignias del aeroplano. Costello le gritó al otro por la radio: «¡Tiene la insignia norteamericana... es un P-40! ». No importaba. Ambos sospecharon un engaño. Era la insignia norteamericana, sí; pero la antigua: una estrella blanca en medio de un redondel rojo sobre fondo azul. Hacía un año casi que los Estados Unidos no la empleaban, porque el redondel rojo se confundía fácilmente con el sol naciente japonés.
Johnny y Costello, volando casi pegados al P-40, atisbaron al piloto detrás del cristal astillado del parabrisas. Tenía la cabeza caída sobre el pecho. Pudieron verle el pelo negro largo, la cara ensangrentada. Costello sostuvo después que el piloto llevaba ya un buen rato de muerto.
Al cabo de unos segundos vieron como el aeroplano fantasma se estrellaba contra el suelo y reventaba. Se fijaron bien en el lugar.
Después, acompañados del médico, orillando los arrozales, se dirigieron en un camión al aeroplano siniestrado. EL P-4o estaba materialmente deshecho por los balazos. Había recibido proyectiles de arriba, de abajo, del frente, de detrás. Se veía que habían hecho blanco en él no sólo otros aeroplanos, sino los antiaéreos también. Nadie atinaba a explicarse cómo el piloto pudo sobrevivir a aquel fuego graneado lo bastante para gobernar el aeroplano hasta allí.
Hubiera resultado imposible identificar al piloto, casi carbonizado, de no ser por unas cartas que se le hallaron en la cazadora de cuero con algunos fragmentos legibles, y por un diario chamuscado.
Sus amigos lo llamaban «Whiskey » Sherrill.*- *Este nombre es imaginario, lo mismo que en algunos casos, los de lugares, por motivos de seguridad militar.-Parece ser que había sido muy aficionado a esa bebida allá en sus buenos tiempos en la Carolina del Sur. Fue a Manila en 1937. Lo destinaron en una escuadrilla de caza. Lo pusieron después al frente del personal encargado de hacer una red de campos auxiliares. «Whiskey» era un aviador de cuerpo entero. No había lugar, por remoto y recóndito, en tódo el archipiélago, adonde él no supiese ir con rumbo certero. Nada más que con mirar el color del agua, sabía, al surgir de entre las nubes, si estaba sobre el mar de Sulú, o sobre el de Bisayas. Construyó campos de aviación por todas partes del archipiélago y se sabía de memoria la situación de cada uno. Así que hubo concluido aquella tarea, lo hicieron subcomandante de escuadrilla.
Después de la fecha luctuosa del 8 de diciembre de 1941, «Whiskey» Sherrill tomó parte en operaciones de reconocimiento y en vuelos rasantes ofensivos. Mermaban los efectivos de aviación a ojos vistas. Le tocó ir replegándose palmo a palmo, atacando y defendiéndose, hacia aquellos mismos aeródromos auxiliares que había construido en la selva.
El 5 de mayo lo halló, con unos cuantos compañeros, en Miramag, en Mindanao, aislado del resto del mundo. Batán se había rendido. Hasta donde llegaban sus noticias, Sherrill calculaba que todo el Poderío militar norteamericano, se reducía por aquellas fechas a once mecánicos que lograron escapar a las islas meridionales dando infinitos rodeos y a un P-40 inservible.
Pensaron que con su aeroplano, hecho de piezas sacadas de otros que se habían estrellado por aquellos parajes, podrían proseguir la guerra por algún tiempo. Fuera de una hélice doblada y un fuselaje medio desvencijado, el aparato, por lo demás, estaba todavía utilizable. Se pasaron dos semanas recorriendo los alrededores a caza de cuanto de aprovechable hubiera en los otros aviones. Por fin, a cosa de siete kilómetros de la base dieron con un P-4o que tenia el fuselaje en bastante buen estado. Con cuerdas y rodillos, ayudados por cuarenta indígenas, fueron llevándolo, metro a metro, hasta Miramag. ¡Pesaba una tonelada!, Cada vez que veían un aeroplano enemigo se apresuraban a tapar el fuselaje con hojas de palma.
Para el mes de agosto ya habían conseguido ajustar el ala útil del primitivo avión al fuselaje. Levantaron una cabria y pudieron izar el motor para colocarlo en su lugar. Sustituyeron el depósito de una de las alas, que se salía. Quitaron el radio y el dinamotor y pusieron un depósito de 5O galones en el compartimiento de equipajes. La gasoliNA la la hallaron en los tanques de un B-17 destrozado. Enderezaron la hélice a martillazos, con una maza pesada sobre el tocón de un árbol de madera dura.
Sólo faltaba por resolver lo del tren retráctil de aterrizaje. A uno de los sargentos se le ocurrió decir bromeando: «Si nevara, podríamos emplear esquíes». Al oírlo, Sherrill se acordó de la vez que había despegado y aterrizado en un P-6 con esquíes en un campo de yerba húmeda.
Cuanto más pensaban él y sus compañeros en los esquíes, más ganas les entraban de hacer la prueba.
Discurrieron el modo de ajustar al avión unos esquíes de bambú, y también el modo de «retraerlos»... el cual no era otro que dejarlos caer, después del despegue, tirando de un alambre. Por supuesto, una vez en el aire, no habría modo de volver a aterrizar. Y a bordo sólo podía ir un hombre.
Sacaron sus mapas y se pusieron a buscar el sitio en que podrían hacer más daño a los japoneses, con ese su único aeroplano. Se decidieron por Formosa. Había 1600 kilómetros hasta el gran apostadero naval japonés de Taihokú. En la costa china, 400 kilómetros más allá, estaba el aeródromo de Kienow. Aprovechando bien la gasolina, el piloto podría llegar allí.
El 6 de diciembre ya habían segado con cuchillos la hierba de la que debía ser la pista. Todo estaba preparado para el despegue. El P-4o hacía una extraña figura sobre sus esquíes. Tenía a bordo cuatro bombas de a 125 kilos y seis ametralladoras de calibre 5O.
Fue Sherrill el que propuso: « Qué les parece a ustedes la idea de celebrar el aniversario del día en que esos canallas nos atacaron, dándoles un susto? Saldré de aquí el 8 de diciembre por la mañana».
A las nueve dee ese día sacaron el avión de su esconditey lo llevaron al extremo alto de la pista. Quedó con la proa enfilada cuesta abajo. La pista, abierta en la yerba, remataba por el otro extremo en cl borde de una roca.
Sherrill fue estrechando la mano a todos. Al subir a la carlinga, notó que había lágrimas en los ojos de sus compañeros. Comprendió que los veía por última vez. Por encima del zumbido del motor, les gritó que arrojaría las bombas donde más daño hiciesen a los japoneses.
El caza arrancó. Fue dando tumbos por la pista, sobre sus esquíes de bambú. Con cada salto cobraba más velocidad. A poco dio un salto mayor, zumbó con más fuerza y se elevó en el aire.
A unos 300 metros de altura Sherrill enderezó el avión, dejó caer los esquíes, volvió a pasar sobre el campo para que sus compañeros, que le daban vítores, pudieran contemplar el fruto de tantos meses de trabajo; y puso rumbo a Formosa.
CINCO HORAS TARDÓ Sherrill en llegar a la isla japonesa, según ha contado después el propio enemigo. Los japoneses alardeaban de que hacía cuarenta años que ningún occidental había podido echarle la vista encima a Formosa. Bueno, pues allí tenían ahora a uno que, paseando los ojos por aquella tierra vedada, los detenía en el espectáculo tentador de un aeródromo con hileras de bombarderos y cazas aparcados con perfecta simetría.
El teniente Sherrill voló sobre una y otra hilera vaciando cargador tras cargador de sus ametralladoras. Con el borde del ala cortó la bandera japonesa que ondeaba en el edificio de la jefatura. Arrojó la primera bomba en. el pabellón de las oficinas. Los aviones japoneses empezaron a echar humo, a arder, a estallar.
Las descargas de los antiaéreo estremecían el aeroplano. Todo lo que Sherrill podía hacer era volar bajo para no ofrecer blanco seguido a los artilleros. Y siguió ametrallando cuanto aeroplano fue apareciendo en su mira.
Remontaron el vuelo unos cuantos zeros. Sherrill arrojó su última bomba en el cobertizo. Se lanzó sobre los cazas enemigos haciendo fuego para abrirse paso por entre ellos. Y no se sabe por qué prodigiosa alianza de la intrepidez serena de Sherrill y la insospechada resistencia del P-4o a las balas enemigas, pudo el aviador norteamericano remontarse hasta las nubes y desaparecer de la vista de sus perseguidgres rumbo a China. ¿Cómo halló, sin instrumentos, la derrota exacta? Fue volando derecho como un águila de Taihokú a Fuchau, a Kienow, como se comprobó por la red de puestos de escucha de los chinos que iban dando cuenta de su paso.
De la bruma emergió primero un aeroplano. Luego otros dos. Un tableteo de ametralladoras. Un avión y un piloto ya mortalmente heridos, que son otra vez, blanco de una granizada de proyectiles. Sherrill volvió la cara ensangrentada para dirigir una última mirada a través de la cúpula destrozada de su carlinga a aquel Caza norteamericano de afilada proa que volaba tan cerca de él. ¡Así es la vida! Ya estaba de vuelta. ¡Presente! ¡Cumplida la orden ...!
martes, 22 de marzo de 2016
ANECDOTARIO DE ABRAHM LINCOLN --William Herndon
lunes, 28 de diciembre de 2015
LA PEOR PESADILLA DE HITLER
Historia ficticia, imaginación del autor que bien podría ser haber sido una realidad.
Escrita por un huehueteco apasionado por la historia
1967-En algún lugar de la Patagonia
El hombre desperto sudoroso, con la boca reseca y el corazón palpitante.De su corazón y de su boca salió un torrente de maldiciones. La rubia mujer a su lado, inquieta, le preguntó:
jueves, 28 de junio de 2018
MILAGROS EN ISRAEL-5-
Este mensaje fue traducido en memoria de nuestro querido Pastor José Holowaty, quien amaba profundamente a Israel - el pueblo de Dios
Fue gracias a Eddie Jacobson que el presidente Truman se entrevistó con Chaim Weizmann. El resultado de esa reunión fue que Estados Unidos reconoció el estado judío.
jueves, 28 de junio de 2018
MILAGROS EN ISRAEL- SIETE-
Este mensaje fue traducido en memoria de nuestro querido Pastor José Holowaty, quien amaba profundamente a Israel - el pueblo de Dios
UN ANGEL LEVANTA PESADA VIGA--MAGNIFICOS VISITANTES
Al viajar en el interior de China desde la provincia de Shanshi hacia Pekin, yo acostumbraba detenerme en Shih, Chia Chuang. Allí trabajaba fielmente para el Señor Peter Rasmussen, un misionero danés. Construyeron una linda iglesia, donde se reunían unos 300 cristianos para adorar.
Al mostrarme este edificio desde el exterior, el reverendo Rasmussen me llamó la atención hacia una pesada viga de hormigón ubicada bien alto sobre la entrada de la iglesia. Me contó que costó mucha imaginación y trabajo colocarla allá arriba. Debido a que no contaban con equipo moderno, tuvieron que construir un andamio.
Con gruesas cuerdas tiradas por muchos hombres fornidos, consiguieron finalmente alzar la viga para colocarla sobre la pared ya levantada. El reverendo Rasmussen observó cómo alzaban la viga hasta su lugar. Levantaron la viga hasta el punto más alto posible. Fue entonces que, para pesar y desilusión suya, pudo ver que todavía faltaba alzarla un poco más para poder colocarla en su lugar. Mientras consideraba qué habría que hacer, miró hacia arriba y vio que la pesada viga reposaba en su lugar apropiado. No pudo imaginar cómo pudo haber sucedido esto.
Más tarde durante el culto, en la iglesia, una de las mujeres cristianas se levantó para dar testimonio. Relató que ella estaba presente cuando la viga estaba siendo levantada, y que ella había visto cómo un ángel levantó y colocó la viga en su lugar adecuado.
Esta no es la primera vez que un ángel ha usado las manos para mover objetos pesados. ¿Acaso Mateo no nos dice que un ángel descendió del cielo y removió la piedra de la puerta del sepulcro de nuestro resucitado Señor y Salvador (Mateo 28:2)?
Cuando Jesús apareció a sus discípulos poco después de su resurrección, les dijo: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura" (Marcos 16:15).
¿Cuál es el mensaje del evangelio? La sencilla historia del amor de Dios expresada en Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna."
Romanos 10:13 nos dice: "Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo." Entonces surge la pregunta: "¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y como oirán sin haber quién les predique? (v. 14).
El Señor ha enviado profetas, predicadores y misioneros para contar las buenas nuevas, y ángeles como ayudadores, vengadores, guías, mensajeros, guardianes, y escoltas.
jueves, 26 de mayo de 2016
EL INFIERNO EXISTE- Cap. 6by Mary Katherine Baxter
Queda Muy Poco Tiempo!
La actividad del infierno
Delante de nosotros podía ver una luz amarilla y opaca. Jesús y yo habíamos salido del tunel del temor y ahora estábamos parados en un borde y mirábamos hacia el vientre del infierno. Hasta donde yo podía ver, no había mucha actividad en el centro (o vientre) del infierno. Nos detuvimos y Jesús habló.
“Yo te voy a llevar por el vientre del infierno y te voy a revelar muchas cosas. Ven y sigueme.” Los dos caminamos hacia adelante.
Jesús dijo, “delante de nosotros hay muchos terrores. No es La ficción de la imaginación de alguien—son reales. Asegúrate de contarle a tus lectores que los poderes demoníacos son reales. Diles también que satanás es real y los poderes de las tinieblas son reales, pero diles que no se desesperen, porque si mi pueblo, que está llamado por mi nombre, se humilla, ora y se aparta de sus malos caminos, entonces los escucharé desde los cielos y sanaré su tierra y sus cuerpos. Así como el cielo es real, también el infierno lo es.
Dios quiere que tu sepas del infierno y El te quiere librar de ese lugar. Dios quiere que tu sepas que tienes una salida. Ese camino es Jesucristo, el Salvador de tu alma. Acuérdate, solamente los que tienen sus nombres escritos en el libro de la vida del cordero serán salvos.
Llegamos a la primera actividad en el vientre del infierno. Esta se encontraba a la derecha de donde habíamos entrado y sobre una pequeña colina en una esquina oscura del infierno.
Me acuerdo de las Palabras que me dijo el Señor, “en ocasiones sentirás como que te he
abandonado, pero no lo haré.
Acuérdate que yo tengo todo poder en el cielo y en la tierra. En ocasiones los malos espíritus y las almas perdidas no nos verán o sabrán que estamos aquí. No temas, lo que estás por ver es real.
Estas cosas están aconteciendo ahora mismo y continuarán sucediendo hasta que la muerte y el infierno sean lanzados dentro del lago de fuego.
Queridos lectores, asegúrense que sus nombres estén escritos en el Libro de la vida del Cordero.
Delante mio se escuchaban voces y el grito de un alma en tormento. Caminamos hasta la pequeña colina y miramos sobre ella. Una luz llenaba el área, y podía ver claramente. El lugar estaba lleno de gritos que jamás uno cree poder escuchar alguna vez. Eran los gritos de un hombre. “Escúchame,” me dijo Jesús, “Lo que estás por ver y escuchar es verdadero. Tomen esta advertencia predicadores del evangelio, porque esto son dichos fieles y verdaderos. Despertad, evangelistas, predicadores, y maestros de mi Palabra, todos los llamados a predicar el evangelio del Señor Jesucristo. Si estás pecando, arrepiéntete o perecerás igualmente.”
Caminamos hasta unos 15 pies de esta actividad. Yo vi unas criaturas vestidas de negro, marchando alrededor de un objeto parecido a una caja. Al examinarla de cerca pude ver que la caja era un ataúd y las criaturas marchando alrededor del ataúd eran demonios. Era un ataúd real, y doce demonios marchaban a su alrededor. Según marchaban estaban cantando y riéndose. Cada uno tenía una lanza aguda en su mano, la cual metían con violencia por unos agujeros de la parte externa del ataúd.
Había una sensación de gran temor en el aire, y yo temblaba delante de lo que veía. Jesús leyó mis pensamientos, pues me dijo, “Hija, hay muchas almas en tormento aquí y hay muchos tormentos diferentes para estas almas. Hay un castigo mas grande para aquellos que predicaron el evangelio y después regresaron al pecado, o para aquellos que no obedecieron el llamamiento de Dios para sus vidas.
De pronto escuché un grito tan desesperado que mi corazón se llenó de espanto. “No hay esperanza, no hay esperanza!”él decia. Este grito sin esperanza procedía del ataúd. Era un llanto interminable de pesar. “Oh, que terrible,” yo exclamé.“Ven,” dijo Jesús, “acerquémonos.” Al decir eso caminó hacia el ataúd y miró hacia adentro. Yo le seguí y también miré. Aparentemente los malos espíritus no nos podían ver.
Un vapor gris y sucio llenaba el interior del ataúd. Este era el alma de un hombre. Mientras miraba, los demonios metían sus lanzas dentro del alma del hombre que se hallaba en el ataúd. Yo jamás me olvidaré del sufrimiento de esta alma.
Yo le dije a Jesús, “Déjalo salir, Señor; déjalo salir.” El tormento de esta alma era un espectáculo terrible, si solamente se pudiera liberar. Le jalé la mano a Jesús y le rogué que dejará salir al hombre del ataúd.
Jesús me dijo, “Mi hija, sea la paz.” Cuando Jesús habló, el hombre nos vío. El dijo, “Señor, Señor, déjame salir, ten misericordia.” Yo miré y vi mucha sangre. Delante de mis ojos había un alma, adentro del alma había un corazón humano del que salpicaba sangre. Las punzadas de las lanzas estaban literalmente traspasando su corazón.
“Yo te serviré ahora, Señor.” El rogó, “Por favor, déjame salir.” Yo sabía que este hombre estaba sintiendo cada lanza que traspasaba su corazón. El Señor dijo, “Es atormentado día y noche. Satanás lo trajo aqui y es satanás quien lo atormenta.”
El hombre exclamó, “Señor, estoy listo para predicar el verdadero evangelio. Yo contaré del pecado y del infierno. Pero por favor, sácarne de aqui.”
Jesús dijo, “Este hombre fue un predicador de la Palabra de Dios. Hubo un tiempo cuando me sirvió con todo su corazón y llevo a muchas personas a la salvación. Muchos de sus convertidos, aún después de haber pasado muchos años, todavía me sirven.
La concupiscencia de la carne y el engañó de las riquezas lo llevaron por el mal camino. El permitió que satanás reinará sobre él. El tenía una iglesia grande, un buen automóvil, y una buena entrada financiera. El comenzó a robar de las ofrendas de la iglesia y a enseñar mentiras. El habló mayormente mitad mentiras y mitad verdades. El no permitió que yo lo corrigiera. Yo envié a mis mensajeros para que le dijeran que se arrepintiera y predicara la verdad, pero él amaba los placeres de esta vida, más que la vida con Dios. El sabía que no debía de predicar o enseñar otra doctrina que no fuera la verdad que está revelada en la Biblia. Pero antes de morirse dijo que el bautismo con el Espíritu Santo era una mentira y que los que reclamaban tener el Espíritu Santo eran hipócritas. El dijo que se podía ser un borracho y todavía ir al cielo, aún sin arrepentirse.
El dijo que Dios no envia a nadie al infierno—que Dios era muy bueno para hacer eso. Hizo que mucha gente buena cayera de la gracia de Dios. Aún dijo que no me necesitaba, pues él era como un Dios. El ofreció hasta seminarios para enseñar esta doctrina falsa. El pisoteó mi Santa Palabra. Pero aún asi, yo lo continue amando.”
“Mi hija, es mejor no haberme conocido que haberse apartado de servirme,” dijo el Señor. “Solamente te hubiera escuchado, Señor!” yo lloré. “Si solamente le hubiera importado su alma y las almas de otros”.
“El no me quiso escuchar. Cuando lo llamé, él no me escuchó. El amaba la vida fácil. Lo llamé, y lo llamé al arrepentimiento, pero él no quiso regresar a mí. Un día murió y llegó inmediatamente a este lugar. Ahora satanás lo atormenta por haber predicado mi Palabra y haber salvado almas para mi reino. Este es su tormento.”
Yo miraba los demonios mientras estos continuaban marchando alrededor del ataúd. El corazón del hombre latía y de éste salía verdadera sangre. Jamás me olvidaré de sus gritos de dolor y tristeza.
Jesús miró al hombre en el ataúd con grande compasión y dijo, “La sangre de muchas almas perdidas están sobre las manos de este hombre. Muchas de ellas están en tormento ahora.”.
Jesús y yo continuamos el camino con corazónes adoloridos. Según nos alejabamos, ví a otro grupo de demonios acercarse al ataúd. Eran cerca de tres pies de alto, vestidos con ropas negras, con capuchas negras sobre sus rostros. Se turnaban para atormentar esta alma.
Yo pensé como el orgullo en todos nosotros a veces no nos deja admitir errores y pedir perdón.
Rehusamos arrepentirnos y humillarnos, y seguimos como si fuéramos los únicos que tenemos la razón. Pero escuchenme, almas, el infierno es real. Por favor no vayan a ese lugar.
Jesús y yo caminamos a un solar limpio con piedras regadas por todo lugar. Habían paredes bajas en algunos lugares, todas hechas de tierra y de piedra. Una luz muy brillante alumbraba en un area del tamaño de un gran salon de baile.
Jesús me dijo, “Hija, mira las obras de satanás.” Esto es lo que vi y escuché. El aíre estaba lleno de una música hermosa y en el medio del salón de baile, en un piso de baile bien alumbrado habían cinco hermosas bailarinas. Estaban paradas en línea y moviéndose juntas al sonido de la música. Al bailar sonreían. Parecía un concurso de belleza,las mujeres eran esplendorosamente bellas. Es más, eran tan atractivas que no parecían reales.
Yo pensé dentro de mi, Cómo puede algo tan hermoso estar en el infierno? Las ropas que las
mujeres vestían eran hermosas y muy costosas. Parecían princesas sin una sola falta. Todo en ellas parecía ser perfecto.
Yo quería saber que hacian ellas en el infierno. No se les veía malignas o pecadoras. Entonces me di cuenta que estaban bailando al movimiento de un fuego y llamas subían y bajaban por sus cuerpos perfectos. Ellas se reían cuando las llamas rodeaban sus cuerpos. Ellas no se quemaban, ni tampoco sentían dolor.
Yo las miraba cuando como de pronto la música paró y el salon de baile quedo en silencio.
Las bellas mujeres en línea se quedaron quietas y miraban a alguien que se acercaba. Una presencia maligna llenó el lugar un mal como el que jamás había experimentado. Y entonces ví la espalda de una persona oscura todo envuelto en sombras, se hallaba de espaldas hacia mi, y estaba vestido con una sotana larga y una capa oscura. A su lado habían dos hombres parados, sus espaldas estaban también hacia mi y Jesús. Yo sabía que ellos no nos podían ver. Jesús dijo,
“Velad.”
Yo sabía que la presencia maligna era satanás, pues ahora las hermosas mujeres comenzaron a inclinarse delante de él y a cantar, “ satanás, salve, satanás!”
Satanás comenzó a hablar, diciendo, “Mis hijas, ustedes han obedecido mis mandamientos y están listas para salir a la tierra para hacer mi voluntad. Se les han sido dado los poderes de las tinieblas y tienen todos los recursos del infierno para respaldarlas en vuestro trabajo.”
Satanás se rió malignamente y dijo, “y ahora, para recordarles a ustedes de mi poder, les voy a demostrar lo que sucederá si no me obedecen explícitamente. Satanás batió sus manos sobre ellas y comenzaron a gritar. “Oh, satanás, por favor no lo hagas. Nosotros te obedeceremos y haremos lo que nos ordenes. Por favor, satanás, no nos atormentes.” Pero satanás no escuchó.
Yo miraba atónita como los hermosos cuerpos de estas mujeres comenzaron a volverse en la carne gris decaída del infierno. Lo que en una ocasión había sido perfecto en belleza ahora era despreciable por su fealdad.
Los hermosos cuerpos se deshicieron, hasta que solamente quedaba una forma horrible de un cuerpo de muerte. Sus formas de muerte estaban llenas de demonios y malos espíritus, y de sus estómagos salían culebras grandes y largas que se deslizaban a su alrededor.
“Jesús, qué significa esto?” Yo le pregunté. Jesús no me respondió. “Satanás, por favor, devuélvenos nuestros hermosos cuerpos,” las mujeres rogaban. “Nosotras te obedeceremos.” El aire volvía a estar lleno de carcajadas otra vez mientras satanás batía sus manos en el aire mientras que las feas formas se conviertieron en bellas y hermosas mujeres de nuevo.
Satanás les dijo a ellas, “Escúchenme y obedézcanme. Hagan todo lo que les pido y podrán
quedarse con esos hermosos cuerpos. Ahora miren, y yo les enseñaré donde quiero que obren mis obras malignas.”
Al fin de esto, el hombre que se hallaba a la izquierda de satanás levantó su mano y una luz apareció en la pared del este. En la pared había una pantalla de teatro, y en la pantalla habían
retratos de lugares comunes de la vida diaria.
Satanás dijo, “vayan a estos lugares y vivan y actúen como personas normales. Engañen a mucha gente y desvíen de Dios a todos los que puedan. Yo las estaré observando y cada uno de sus movimientos me será conocido. Tengan cuidado que no las descubran y yo cuidaré de ustedes.”
Satanás señaló hacia la pantalla de dar películas y comenzaron a aparecer diferentes escenas. Allí apareció la calle de una ciudad, un club de baile, una tienda, una panadería, una tienda de departamento, un banco, unas bodas, una de venta de cosas usadas, una iglesia y una alcaldía.
Todos los lugares presentados eran lugares regulares y muchos otros lugares similares les fué
presentado en la pantalla por satanás.
“Ustedes van a engañar a muchos y a causar que muchos se aparten de la verdad. Ustedes irán por toda la tierra y harán mi obra y regresarán a mi con sus reportes. Si necesitan ayuda, yo se las enviaré. Ustedes han sido bien entrenadas en el uso de sus poderes diabólicos.
Vuestra misión es conseguirme almas. Ustedes las pueden atraer usando la brujería, religiones falsas y el ocultismo. Vosotras podéis llevar a los cristianos débiles a los pecados de la carne.
Vosotras podéis plantar semillas de dudas acerca de la verdad sobre La Palabra de Dios. Sacar a hombres y mujeres del evangelio de Jesucristo y destruirlos si pueden.”
A satanás le trajeron un púlpito alto donde habían unos papeles. El los levantó y comenzó a leerles muchas cosas a esas mujeres.
Yo solo entendí algunas cosas pero otras no. “Escojan un alma a la semana,” les decia satanás, “y trabajen con esa alma toda la semana. Les dare tres semanas para corromper esa alma, y después se me reportan. Nada les faltará pues tienen muchas riquezas a su disposición. No se olviden que el alma que ganen, ira y también ganará muchas otras para mi. Trabajen duro y yo las recompensaré.
Pero si me desobedecen, revelaré su verdadera identidad al mundo.
Acuérdense, ustedes tienen el poder para cambiarse en cualquier forma que deseen. Les enviaré todo lo necesario para que tengan éxito. Ahora váyanse y hagan mi trabajo y regresen en un mes.”
“yo le ganaré a Dios!”, grito satanás mientras batía sus manos otra vez, y las hermosas mujeres comenzaron a ascender a la tierra.
Miré y en el lugar donde las mujeres habían estado paradas solamente quedaba el fuego. Escuché cuando satanás le dijo a los dos hombres que estaban con él, “Miren” y señaló a la pared donde colgaba la pantalla. “Yo odio a Dios,” dijo él, “y éstas harán un buen trabajo para mi.”
En la pantalla yo vi que las mujeres hermosas estaban en las ciudades, tiendas, iglesias y cantinas, haciendo su obra maligna. Estas eran espíritu de seducción, demonios del infierno sueltos sobre la tierra y la gente no sabían que eran demonios.
Yo pensé, los poderes de demonios son reales. Verdaderamente que están en la tierra enganañdo a todos los que pueden. Ellos estafan, mienten y roban para alcanzar un discípulo para satanás.
La pantalla de cine desapareció de pronto y ví a satanás y a los dos hombres con él desaparecer en una nube de humo.
Después Jesús me enseñó un reloj gigante, que cubría todo el mundo. Y lo escuché tocando. La manecilla que marca la hora estaba cerca de la posición del 12 y la manecilla que marca los minutos corrió alrededor hasta que se paró en los tres minutos antes de las 12. Firmemente la manecilla de los minutos se movía hacia la hora. Mientras se movía, el sonido del reloj sonaba más alto y más alto hasta que parecía que llenaba toda la tierra.
Dios habló con el sonido de trompeta y su voz sonaba como el estruendo de muchas aguas. El dijo, “Escuchen y oigan lo que el Espíritu le dice a las iglesias. Estad listos, porque en una hora cuando ustedes no lo piensan, yo vendré otra vez. Yo escucho el reloj dando la hora. Ya son las doce. El esposo ha venido por su novia.”
Mi amigo, estás listo para la venida de Cristo? o serás como aquellos que dicen, “Hoy no, Señor.”
,Clamarás a El para ser salvo? Le darás a El tu corazón hoy?
Acuérdate, Jesús puede y te salvará de todo mal, si tu clamas a El hoy y te arrepientes. Ora por tu familia y tus seres queridos para que vengan a Cristo antes que sea muy tarde.
Escuchen lo que dice Jesús, “Te protegeré de todo mal. Te guardare en todos tus caminos. Yo te salvaré. Yo salvaré a tus seres queridos. Clama a mi hoy.”
Con lágrimas estoy orando para que todo aquel que lea este libro entienda la verdad antes que sea muy tarde. El infierno perdura por toda la eternidad. Yo estoy tratando de revelar lo mejor posible todo lo que vi y escuché. Yo se que estas cosas son verdaderas. Oro, que mientras leas el resto de este libro te arrepientas y recibas a Jesucristo como tu Salvador personal.
Yo escuché al Señor decir, “Es tiempo de irnos; regresaremos mañana.”
A ORILLAS DEL RIO KWAI --HIDALGUIA DE ROMMEL EN LA GUERRA
No tomé conciencia de la existencia de esta iglesia hasta que el reverendo Alfredo Webb llegó con un contingente de prisioneros de otro campamento. Inició un eficiente ministerio y rápidamente se ubicó como pastor sabio y afectuoso de una congregación en permanente crecimiento. Se enteró de mis charlas y actividades de grupo y me invitó amablemente a colaborar con él.
Llegó el domingo en que predicaría mi primer sermón. No contábamos con manuales de homilética. Pero estaba la Palabra de Vida, el testimonio de la Biblia y las palabras de Jesús para nuestra situación. Poco antes de comenzar el culto, mi amigo Bill Maclean me pasó su Biblia. Estaba abierta en las siguientes palabras del capítulo 12 de Lucas:
Cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis por cómo o qué habréis de responder, o qué habréis de decir; porque el Espíritu Santo os enseñará en la misma hora lo que debáis decir." (Lucas 12:11, 12)
Fortalecido por ese pasaje, encontré las palabras. Prediqué sobre la parábola del hijo pródigo. Los hombres venían al culto con el corazón preparado, corazones abiertos para recibir las bendiciones que sólo Dios podía dar. Días más tarde, se acercaban para dialogar sobre algún punto que les interesaba. El carácter de sus preguntas me daba luz, y me demostraba que las necesidades espirituales son comunes a todos los hombres.
Todas las noches realizábamos un culto de oración por aquellos que estaban enfermos, por nuestras familias, por nuestras necesidades diarias. Orábamos pidiendo orientación y fortaleza para las pruebas que teníamos por delante.
Necesitábamos el don de un espíritu sereno, de modo que orábamos pidiendo tranquilidad para dormir. Mientras vivíamos en la seguridad de la vida civil nunca le habíamos prestado mucha atención al asunto del sueño. Pero aquí era diferente. Las mentes de los hombres estaban cargadas con el recuerdo de sucesos horrorosos que no les permitían descansar. A menudo sus alaridos perturbaban el sueño del campamento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario