miércoles, 14 de marzo de 2018
ALBERTO Y ELIZABETH -" PASEO EN LA COLINA"" Hace muchos años Elizabeth era dueña de un terreno en una colina. Un día decidieron con Alberto ir a pasear a la colina y darle un vistazo al terreno.. Alberto aceptó encantado porque disfrutaba enormemente el platicar y estar en la compañia de Elizabeth-. Elizabeth con unos hermosos ojos que le cambiaban de color, según la estación del año., algunas veces eran extraordinariamente avellanados claros y otros eran combinados con tintes cafes avellanados, un cuerpo de forma escultural, cejas maravillosas y labios tan hermosos especialmente el inferior con una forma que , que Alberto se complacia en decirle "Su boca es como una jarra de agua fresca donde yo bebo el agua dulce"
Un sábado por la tarde , Alberto y Elizabeth deciden irse caminando cosa de media hora desde el lugar donde se reunieron hasta el terreno a visitar. Compran algunas golosinas y unos refrescos y al llegar a la colina, suben finalmente al terreno. Es un lugar con varios arboles de pino y otros.En un momento dado suben a un lugar alto, a una especie de mirador, donde aprecían una parte de la ciudad donde viven. Un par o de años antes, Alberto en un viaje a una región sumamente montañosa, selvática, habiase tomado unas fotos, entre ellas, una donde sea que así fuera, o por efectos de la cámara, resaltaba su torax y sus brazos en una forma atletíca. Resulta qué Alberto unos días antes de ir al paseo con Elizabeth, pensó mostrarle esas fotos.
El día del paseo, Alberto le dice a Elizabeth que quiere mostrarle unas fotos de cuando el disfrutaba de las montañas lejanas y de sus vivencias. Al tener Elizabeth las fotos en sus manos y cuándo vió especialmente la foto donde Alberto aparecía con de medio cuerpo con su mirada hacía el cielo y resaltaba su porte atletico captado por la cámara, y al fondo un río lleno de árboles frondosos. Elizabeth , tomó la foto y la besó, imprimiendóle sus bellos labios, y al mismo tiempo dijo que ya no se la entregaría a Alberto y que ella se quedaría con la foto. Alberto como estaba muy enamorado de Elizabeth , su mayor alegría fue darle la foto a su amada. Ríendose y contemplando el ocaso del sol, Alberto y Elizabeth se abrazarón y se dieron uno o varios besos de los más deliciosos. Debo decir en honor a la verdad que el amor de Alberto y Elizabeth era muy equilibrado y correcto. Tiempo después Elizabeth devolvió la foto a Alberto. Pasó un tiempo más y en una ocasión, Alberto puso esa foto en un lugar de su casa, y resulta que una tarde llovió muy fuerte con aire, y el agua cayó encima de la foto, Alberto tomó un pedazo de tela y quizo secarla, pero al hacerlo en lugar de la tinta, quedó una mancha blanca y dejó inservible la foto. Alberto buscó en vano entre sus archivos un negativo de la misma, pero no lo encontró, buscó en vano en sus archivos, en su computadora alguna copia y resulta que un día la computadora se había desfigurado y se habían borrado todas sus imágenes
No hay comentarios:
Publicar un comentario