miércoles, 10 de agosto de 2022

SANTANDER, ESPAÑA- “POR TIERRAS SANTAS Y POR TIERRAS PROFANAS”

POR TIERRAS SANTAS Y POR TIERRAS PROFANAS

POR J. MOISÉS DELEON LETONA

(El escritor es tio abuelo del autor del blog- un huehueteco apasionado por lo de antaño.)

IMPRESIONES DE UN GUATEMALTECO EN SU VIAJE
ALREDEDOR DEL MUNDO DURANTE LOS AÑOS DE
1922 A 1924.

Es el libro que a continuación leeremos y es debidamente apreciado a nivel mundial. Se encuentra en las siguientes bibliotecas

Librería del Congreso de  los Estados Unidos de América

Biblioteca Teológica "Lorenzo Boturini" de la Basílica de S.M. de Guadalupe. Ciudad de México

Bibliotheca Generalis Custodiae Terrae Sanctae-Ciudad de Jerúsalen

Libro que forma parte del Patrimonio Literario de España-. -Dedicación del autor a S.M. el Rey D. Alfonso XIII-XIV.

Santander.

 La interesante ciudad de Santander es capital de la Pro­vincia de su mismo nombre; su puerto, con igual denominación y unido a ella, está sobre las aguas del Golfo de Vizcaya for­mado por el Mar Cantábrico; cuenta con 35 mil habitantes, constituye uno de los departamentos marítimos y tiene la ele­vada categoría de Arzobispado. Es componente de la 7a. re­gión agronómica, división de fines agrícolas y estadísticos, comprende una de las regiones de la organización del Ejército y posee Cámara de Comercio y de Navegación. Las plantas eléctricas dan fuerza y luz a las industrias y a los usos domés­ticos; sus vías interiores de comunicación llenan su objeto y todos los adelantos de la época se hacen sentir, pues hay confort, comodidad y holgura en aquel centro, en que la vida es tan agradable.

 Hablando de los recursos naturales, de la Agricultura y de la ganadería de Santander, que naturalmente se reflejan en su puerto y capital a la vez, diremos que la tercera predomina,

 debido a que los pastos son muy abundantes, de primera cali

 -250—

 J. M. DELEON LETONA

 dad; que se cultivan en grande escala: lino, trigo, cebada, cen­teno, avena y maíz; también: garbanzos, guisantes, habas y judías. Sin duda, el magnífico clima contribuye, entre otros elementos, a la bondad de las cosechas. En sus bosques, se pueden ver millares de hectáreas cubiertas de robles y hayas, que son una verdadera fortuna.

 Vimos arrogantes caballos andaluces, de paso y de trote, todos de lujo. Son de perfil convexo y corpulencia mediana; de orejas pequeñas y movibles, de ojos muy vivos, de crines negras y finas; en fin, animales nobles, sensibles y elegantes, que relinchan al ver a su amo y le comprenden, casi como un sér razonable.

 Nos cupo en suerte admirar algunos toros "Miuras," de la célebre ganadería que lleva el nombre de su propietario (que fué el multimillonario finquero sevillano Don Eduardo Miura) y que son "la última palabra" o "los ases" de actores y especta­dores de la legendaria Fiesta Brava española.

 Aquellas bravas reses de perfil recto y piel negra, con rizos en la frente, de cuello corto y fornido, que infunden tanto res­peto a los propios toreros y pánico a los aficionados y profanos del arte taurino, respiraban salud, fuerza, poder y dureza por todos los poros; parecían exhibir en sus cortas y agudas astas como agujas de acero, las escenas de "Sangre y Arena," que causan tanta nerviosidad, máxime frente a la pantalla cinema­tográfica. Las robustas extremidades sostenían aquella grave­dad de varios centenares de libras que se lanzan unánimemente con la velocidad y la fuerza del rayo contra su amo, el hombre! Ya casi nos sentíamos andando a caballo en la renombrada ha­cienda de Sevilla y ver "Miuras" sardos, barcinos, prietos más negros que el azabache, y contemplarlos en su vida libre, antes de llevarlos al bramadero y cuando corren más que un venado por los potreros.

 Discurríamos cómo los terribles "Miuras" son preferidos por el público en los redondeles europeos e hispano-americanos y por los mismos lidiadores, no obstante que tales bichos han causado durante las corridas, más numerosas desgracias que otros menos feroces y más salvajes; quizá los valientes mata­dores de todos, sientan mayor placer en exponer su vida en los cuernos de aquellas impetuosas fieras porque los aplausos y los vivas• satisfagan más su corazón y su férreo puño, pues unos y otros son hijos del peligro eminente en que su existencia juegan. Tal vez acto continuo de cada acometida en que salen ilesos y victoriosos, se consideran como si volvieran a nacer,

 —251—

 POR TIERRAS SANTAS Y POR TIERRAS PROFANAS

 pensamiento que por sí sólo significa felicidad, acercamiento real a la más hermosa de las utopías. Lo cierto es que los cornúpedos "Miuras" baten el record, pues tienen la suprema­cía en todas las plazas de toros, donde son admirados con entusiasmo.

 También vimos algunos ejemplares de carneros merinos que gozan de tanta fama por la calidad superior de su lana, que es suave, resistente y elástica y cuyos vellones se emplean para la fabricación de paños y casimires, que ocupan el primer lugar entre las telas de su clase.

 En el interior de un café, el júbilo convidaba a disfrutar del baile de la Jota Aragonesa, gentilmente ejecutado por una chispeante doncella de 17 años, que lucía precioso mantón de manila y sonaba las castañuelas al compás de la clásica música; bailaba con entusiasmo, con gracia y natural soltura, al mismo tiempo que dirigía miradas de fuego a sus amigos que presen­ciaban embebidos, sombrero en mano.

 En una mesa, un grupo de señoritas o mancebos saboreaba y bebía sustancioso vino de consagrar y en otra, formando rueda y teniendo en el centro rojos claveles de Sevilla, varias mucha­chas paladeaban y comían el proverbial y suculento arroz a la valenciana.

 Muchas bellezas nos impregnaron sus recuerdos en las bu­lliciosas calles de Santander y las de sus jardines, galerías y museos de arte, sirven de pedestal al culto que se rinde a sus encantadoras mujeres, que condensan mucho del ardiente afecto y de la fogosa alma que caracteriza a los españoles.

 Se nos presentó la ocasión de ver el embarque de variadas mercaderías, pues Santander es también punto de salida del grueso comercio: vinos y licores, papelería, ciruelas, pasas, frutas secas en general, paños, garrafones vacíos, corchos, sar­dinas, aceitunas, aceite de comer, turrones, etc., eran traslada­dos al fondo de las naves, lo mismo que espadas, cuchillos y otros artículos de las afamadas fábricas de Toledo, cuyo finí­simo acero es el mejor del mundo.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENTRADA DESTACADA

AÑO DE 1662- ALGUNAS BODAS CHIANTLA

ALGUNAS BODAS CHIANTLA 10-junio 2018- HIPANOAMERICA SEFARAD 1682 16 ANDRES HERRERO CON LUCIA DE ZEA ,PADRINOS EL CAPITÁN CLAUDI...