CREACIÓN, TIEMPO Y ETERNIDAD
Por J. S. SECRIST
DEDICADO A LA GLORIA DE DIOS Y A LA SALVACIÓN DEL HOMBRE
CREACIÓN, TIEMPO Y ETERNIDAD *SECRIST* -65-66
HALLAN RESTOS DE GIGANTES PREHISTÓRICOS EN MARYLAND.
Citamos lo siguiente del Christian Herald del 2 de agosto de 1905: "Desde Baltimore, Maryland, llega la noticia de un interesante descubrimiento. Estudiantes de la Academia de Ciencias de Maryland han encontrado en las orillas del río Choptank varios esqueletos gigantescos. Algunos de ellos miden más de dos metros y medio. La colección consta de ocho esqueletos, algunos de los cuales son de mujeres y niños. No están todos completos, pero se han encontrado los huesos más grandes, y hay al menos un esqueleto completo de un hombre adulto. El descubrimiento se considera uno de los más importantes, desde el punto de vista de la antropología, que se ha realizado en años. Los huesos no pueden ser de un entierro reciente, sino que deben haber estado alineados allí durante siglos. La formación del terreno sobre las tumbas da todas las pruebas de ello. Durante la excavación se descubrieron los restos de campamentos de indígenas posteriores. Estos consistían en Montones de conchas de ostras, tierra carbonizada y quemada, y fragmentos de utensilios de cocina. Todo esto se encontraba a tres metros de altura sobre las tumbas que contenían los gigantescos esqueletos. A pesar de su enorme estatura y magnífico físico, no han dejado rastro de sus vidas, salvo sus esqueletos ahora descubiertos.
En este descubrimiento encontramos una réplica casi idéntica a la de California, lo que demuestra que no solo pertenecían a la misma familia, sino también a la misma época. Si no existiera otra evidencia, consideraríamos que el relato bíblico de una raza antediluviana de gigantes quedaría plenamente confirmado. Pero hay mucho más, como veremos.
HALLAN RESTOS DE GIGANTES PREHISTÓRICOS EN TEXAS.
: (Weekly Recorder.) "San Antonio, Texas, 15 de septiembre de 1909." Partes de esqueletos que se cree pertenecen a hombres prehistóricos fueron descubiertas hace unos días por obreros que excavaban en una gravera municipal al norte del Parque San Pedro. La gravera está situada en la ladera de una colina y varias pequeñas cuevas ya han quedado al descubierto al retirar la grava. Sin embargo, en ninguna de ellas se encontró nada. La naturaleza geológica de la colina es del Cretácico Superior, compuesta de piedra caliza blanca y blanda, un material particularmente favorable para la formación de cuevas por la acción del agua. Que los restos encontrados no pertenecen a la época moderna se demuestra, en primer lugar, por el depósito de grava que cierra la cueva y que pertenece al período Pleistoceno, y en segundo lugar, por el tamaño de los huesos. Construidos con las proporciones que conocemos, los restos debieron haber formado la figura de un hombre de más de dos metros de altura. Dado que los indígenas que antiguamente habitaban estas tierras nunca alcanzaron tal estatura, el problema de su identidad resulta tan interesante como enigmático. Evidentemente, el hombre primitivo del continente americano vivía en condiciones similares a las de Europa, donde sus restos se encuentran en las cuevas del Jura. Que este gigante sea otro miembro de la raza antediluviana, perteneciente a la misma raza y al mismo período que los encontrados en California y Maryland, ningún erudito bien informado lo pondría en duda. Su altura estimada es bastante menor de lo que probablemente fue, y pudo haber superado los 2,7 metros. La ubicación del hallazgo no deja lugar a dudas sobre su procedencia. No hubo seres humanos que habitaran la Tierra en una época anterior. Recordamos al lector que desde la creación hasta el diluvio transcurrieron 1600 años, tiempo suficiente para la colonización de todo el mundo. (Véase el capítulo sobre "La Era del Hombre")
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